La globalización es un proceso que se ha acelerado en las últimas décadas. La tecnología, el transporte y las comunicaciones son los principales factores que han contribuido a acercar a las personas y los países.

Las interacciones a nivel global no son equilibradas y de esta manera el poder global se concentra en algunos países u organizaciones mientras que otros lugares quedan relegados en este interjuego de escalas. El mapa global resulta complejo, desigual y recorrido por flujos de distinta índole que tratan de equilibrar o concentrar el poder.

La globalización muchas veces es resistida y sus beneficios son puestos en duda o cuestionados. Así, estas interacciones globales son influidas por factores físicos, polïticos y tecnológicos.