Yo estuve allí
2020-05-03 22:24:32 by Cecilia Villavicencio
Les comparto la versión en castellano de una nota sobre mí, que se publicó en el newsletter de Eleni Vardaki y que se puede leer en su versión original, en inglés, en el siguiente link: https://elenivardaki.com/ib-diploma-student-ib-coordinator/
Hola. Soy Cecilia y soy graduada del Programa del Diploma del Bachillerato Internacional (IB).
Fui una de las (únicas) tres candidatas al diploma en 1995 en el Colegio Santa Brígida de Buenos Aires, Argentina. Obtuve un 37. En mi colegio se tomó como natural que yo aspirara al diploma completo, así que no tuve chances de pensarlo antes de aceptar, aunque jamás me arrepentí. La experiencia del IB es la más relevante en mi historia educativa hasta la fecha, pese a que no dejé de estudiar desde entonces. Tan grande es para mí el IB.
No recuerdo haber experimentado burn out o estrés (sólo una explosión de llanto) mientras cursaba el diploma. En aquel momento me preparaba para una competencia de “aerobics” a la vez que estudiaba para mis exámenes finales.
He trabajado desde los 18 años, en diferentes áreas: escritura, edición, comunicaciones, relaciones públicas (mientras estudiaba Letras en la universidad). No fue hasta 2006, cuando tenía 29 años, que me involucré con el mundo de la educación: la oficina del IB para América Latina publicó un aviso y envié mi solicitud. Marta Rodger (directora regional en aquel momento) fue mi mentora. Así fue como me convertí en la responsable del proceso de evaluación de colegios autorizados a ofrecer el Programa del Diploma, trabajando mano a mano con todos los coordinadores de la región.
Cuando la oficina regional para América Latina se fusionó con las Américas, continué realizando el mismo trabajo para los 1.200 colegios autorizados a ofrecer el Programa del Diploma desde Canadá a Chile. Estaba a cargo del proceso de autoevaluación [leí y edité cada informe de evaluación de todos los colegios americanos desde 2007 a 2013]: aprendí acerca de la implementación del programa a partir de la reflexión que hacían los propios colegios sobre su gestión, repensándose. También estaba a cargo de la administración de las muestras de CAS y de formar a los inspectores a exámenes. Yo misma fui inspectora de exámenes por siete años, como personal del IB.
El IB me dio muchas oportunidades: estrenar mi pasaporte, volar en avión por primera vez, viajar a Europa por primera vez, liderar talleres para coordinadores y directivos, llevar adelante visitas a colegios, disertar en las conferencias regionales, participar del Final Award Committee (¡increíble!), formar a otros educadores experimentados…
Después… la vida real ocurrió; ¡dejé el IB para convertirme en coordinadora del Programa del Diploma! Tuve este rol (junto con otras responsabilidades) por 5 años en el colegio del continuo SEK International School – Ciudalcampo de Madrid, España.
Los primeros 4 años fueron los más duros… Nunca había estado en un colegio (me refiero a todos los días) antes. Sabía qué hacer pero nunca lo había hecho. Era una extranjera en un equipo de, en su mayoría, profesores españoles muy experimentados. Soy muy demandante conmigo misma. Quería hacer bien mi trabajo. ¡No quería decepcionar a aquellos que me habían contratado por mi experiencia en el IB! Dediqué mi vida entera al colegio – también la mayor parte de mi tiempo libre. Amaba tanto a mis estudiantes que me convertí prácticamente en una madre para ellos. Estas relaciones son las que más satisfacciones dan a la larga. Más o menos cada enero de cada año, explotaba. No era el colegio: era yo aceptando todas las tareas que venían a mí. Trabajé entre 60 y 70 horas por semana. A la vez, aprendí cuestiones esenciales de la gestión escolar, liderazgo pedagógico, gestión del cambio… y muchas otras cosas a las que estaba naturalmente expuesta por trabajar en uno de los mejores colegios de España: todo a la mano.
Todas estas cuestiones que mencioné son el bagaje de conocimiento para lo que hago hoy. Son la Directora de Estudios (de Kinder a Secundaria) en un Colegio del Mundo del IB, el St Ignatius’ College en Río Cuarto, Argentina, que ofrece el Programa del Diploma.
Comencé una nueva vida hace un año y medio con una misión personal y profesional: encontrar un equilibrio entre la vida personal y la laboral y promover una cultura escolar que contribuya a este mismo equilibrio en sus estudiantes y docentes. Al principio, tuve que pelearme con mi propia culpa por tener tiempo para mí. Todavía estoy en fase de recuperación.
Fotografía de bantersnaps en Unsplash.